Permiso D – Carnet de autobús
¿Quieres conducir autobuses y trabajar en el transporte de viajeros? En Autoescuela Mega te preparamos para obtener el carnet D, con formación adaptada, clases prácticas en vehículo y todo el apoyo que necesitas para superar el examen.
El permiso D autoriza a conducir autobuses con más de 8 plazas además del conductor, sin límite de longitud, y con la posibilidad de llevar un remolque de hasta 750 kg. Es indispensable para trabajar en líneas urbanas, interurbanas o transporte discrecional de pasajeros.
El examen consta de una prueba en circuito cerrado y una prueba de circulación real. Las maniobras en pista son comunes para los permisos D1 y D, y permiten evaluar tu habilidad en situaciones reales de conducción de autobús.
Maniobra G – Marcha atrás en recta y curva
Esta maniobra consiste en realizar una marcha atrás precisa a través de un recorrido en forma de L, simulando un entorno urbano estrecho.
El aspirante debe:
- Detener el vehículo a 10 metros como mínimo del inicio de la curva, contados desde la parte trasera.
- Retroceder uniformemente por el tramo recto, entrar en la curva y continuar el tramo recto final, manteniéndose centrado.
Durante la prueba no se permite:
- Subir ni forzar el bordillo.
- Rebasar las marcas del recorrido.
- Golpear o derribar jalones.
- Realizar maniobras con el volante en parado.
Los límites del recorrido están marcados con bordillos fijos y jalones verticales.

Maniobra L – Estacionar para permitir entrada y salida de pasajeros
En esta prueba se evalúa la precisión al detener el autobús para que los pasajeros puedan subir o bajar con seguridad.
El aspirante debe:
- Estacionar en el lado derecho de la vía, dejando el vehículo paralelo al bordillo y a una distancia máxima de 20 cm.
- Asegurarse de que ninguna parte del vehículo obstaculice la apertura de la puerta posterior.
- Abrir y cerrar correctamente la puerta, simulando la bajada y subida de viajeros.
- Salir del estacionamiento con un solo movimiento, sin usar la marcha atrás.
No se permite invadir el bordillo ni realizar más de un movimiento de entrada o salida.
